El paso del tiempo, la falta de cuidado o un simple descuido pueden hacer trizas una obra de arte. Bien lo saben Alejandra Bendekovic, Isabel Costabal y Florencia Achondo, que se conocieron cuando trabajaban en el Centro Nacional de Conservación y Restauración. Tras recibir varios llamados de clientes particulares que querían reparar sus “joyitas”, decidieron crear, junto a una cuarta socia, Alejandra Cruz, el Taller TresC. En este año y medio de trabajo ya han reparado cerca de 30 cuadros. Todo un logro, considerando que “se trata de un trabajo minucioso y lento. No es fácil restaurar una tela rasgada”, comentan. Por sus manos han pasado pinturas de Roberto Matta, Pedro Lira y Gracia Barrios, así como también esculturas de Nicanor Plaza y Rebeca Matte. “También nos llegan muchas tallas en mármol e imaginería religiosa”, agregan. Además de la conservación y restauración de un objeto, TallerC trabaja en el manejo de colecciones y en la asesoría y gestión de patrimonio, tanto mueble como inmueble. Los nombres de sus clientes los mantienen bajo siete llaves, pero entre ellos fi guran coleccionistas, universidades, municipalidades y bancos.

  • 10 Marzo, 2011

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