Dejémonos de bromas. Hace rato que Stefan Kramer es más que el simple imitador de personajes faranduleros. El showman ha hecho de su talento una verdadera industria que hoy tiene las salas de cine reventadas de la risa. Y sus bolsillos, para qué decir.

  • 16 Agosto, 2012

Dejémonos de bromas. Hace rato que Stefan Kramer es más que el simple imitador de personajes faranduleros. El showman ha hecho de su talento una verdadera industria que hoy tiene las salas de cine reventadas de la risa. Y sus bolsillos, para qué decir.

Lo más leído