No tenían título de abogado, pero de puro agrandados arrendaron oficina y montaron su propio estudio. Rolando Franco, Gabriel Zaliasnik y Rodrigo Albagli eran los tres socios. Pero como sólo el primero tenía título, se llamaban Franco, Albagli, Zaliasnik Abogado, sin la “s” final, para que no los acusaran de “publicidad engañosa”.
Esas son las anécdotas que recuerdan hoy los dos socios de Albagli Zaliasnik (Franco dejó el estudio al poco tiempo) al cumplir los 20 años de esta oficina.

  • 15 Diciembre, 2011

Lo más leído